Seguramente cuando eras niño/a tenías alguna rima que iba acompañada de ciertos movimientos coordinados con las manos y jugabas ya fuera en pareja o en grupo. Pues a esto se le llama juegos de dedos y en este artículo te contamos por qué entre otros materiales también se usan en las escuelas Waldorf.
Beneficios
Cuando hacemos juegos de dedos acompañados de una canción estamos poniendo en práctica múltiples funciones mentales tales como:
-Coordinación entre hemisferios
-Atención y concentración
-Memoria
-Seguimiento de patrones
-Coordinación vocal-motora
-Lenguaje
Además en las escuelas Waldorf por lo general los juegos de dedos van acompañados por algún instrumento musical que marca la pauta de los movimientos, por lo que la escucha activa también se vuelve un elemento importante.
Los juegos de dedos como preparación para las asignaturas
Todas las funciones mentales que se estimulan mediante los juegos de dedos, se convierten en una preparación muy efectiva para que cuando el niño tenga que adquirir algún conocimiento educativo en el que se ponga en práctica esas mismas funciones, como aprender a leer, sumar o escribir, esté mucho mejor preparado para ello y las posibilidades de éxito sean mayores,
Con respecto a las canciones, aunque existe rimas clásicas que se pueden encontrar en internet, también se pueden crear las propias de acuerdo al contexto individual del niño.
En las escuelas Waldorf para garantizar el éxito en el aprendizaje académico es fundamental haber adquirido una serie de patrones de movimientos maduros l (lateralización correcta, buena integración sensorial, coordinación visomotora, etc.) los cuales se trabajan mediante distintas asignaturas propias de esta pedagogía y actividades como los juegos de dedos.
También existe una estrecha relación entre los juegos de dedos y la estimulación del lenguaje ya que estos trabajan aspectos lingüísticos como: la conciencia fonológica, el volumen, la modulación y un vocabulario rico.
Los juegos de dedos y las emociones
Este tipo de juegos también también son muy útiles para regular emociones, ya que son lúdicos y alegres.
Se pueden emplear para activar a los niños después de una clase que ha resultado agotadora, como forma de concentración, como método de relajación, o bien como estrategia mnemotécnica (las rimas y los movimientos se pueden personalizar a las necesidades educativas que se tengan).
En definitiva, esta actividad en las escuelas Waldorf es un recurso de gran valor pedagógico y de nulo costo económico.
me encantan estos artículos , llenos de información que nos permite seguir creciendo y aprendiendo algo mas . muchas gracias .
Gracias por tu comentario Patricia, es un gusto compartirlos.